sábado, 29 de diciembre de 2012

Cap. 48: ¿Sorpresa?

Bueno, ahora mismo no tengo ideas para escribir así que.... bueno... ya ustedes me dirán. 
Besucos: Melody. 

P.D.: HOLA AROA.



_Narra Samanta:

      - Cariño, despierta.- Dijo una voz femenina.- Tienes que ir a clase.

    Abrí poco a poco los ojos. Estaba en el sofá del salón, apoyada en Niall.

      - Mierda.- Grité por lo bajo.- A primera tengo examen de Literatura.- Dije levantándome rápidamente.

    Subí a lavarme lo más rápido que pude, me vestí con lo primero que pillé: un vaquero, una camisa azul con botones, las deportivas Reebook que me regalaron las pasadas Navidades y me recogí el pelo con una coleta alta.

    Me cogí una tostada, corrí hasta la bici con la tostada en la boca y en cuanto me subí en esta fui corriendo al instituto. Llegué justo cuando sonó la campana para entrar a clase.


_Narra Niall:

      - Niall, despierta.- Me decía alguien.

      - Ah, señora Weck, lo siento. Ahora me voy.- Dije levantándome.

      - Tranquilo. ¿Quieres algo para desayunar?

      - No hace falta, yo ya me voy... ¿y Samanta?

      - En el instituto. Bueno, pues hasta luego, ya sabes que puedes venir siempre que quieras.

      - Muchas gracias señora Weck.

    Cogí la película y me fui al videoclub a devolverla. Volví a casa tranquilamente, entonces, por la calle, me encontré a Liam.

      - Hola Niall.- Dijo.

      - Liam, casi ni te hubiera reconocido.- Dije señalando el poco pelo que tenía.

      - Bueno... a veces están bien los cambios ¿no? Y ¿qué tal todo con Samanta?

      - Muy bien, gracias.

      - Me alegro por vosotros dos.

      - Oye y... ¿ya has hablado con Danielle?

      - Em... algo así. La invité a NY para que nos vea en el MSG y aceptó.

      - Eso es algo bueno ¿no?

      - Sí.... ¿Y Samanta va?

      - No puede, tiene que ir al instituto.

    Fuimos a dar una vuelta por ahí. Costaba hablar con él con el rostro triste que tenía en la cara.

      - Y cuándo nos vamos a NY.

      - El día 1.

      - Qué pocas ganas....

      - Jajaja. Anda, que esto es solo una vez en la vida.

      - Tienes razón.... Bueno, me voy a casa ya.

      - Nos vemos.


_Narra Samanta:

     Estuve con todos los exámenes, unos más difíciles que otros, el último examen del día fue el peor de todos, era uno de Biología, con lo mal que se me daba seguía sin entender por qué lo escogí.

    Bueno, terminaron las clases, no vi a Chris a la salida así que me volví con Aaron. Ambos nos fuimos a dar una vuelta en bici.

      - Hacía semanas que no veía tu sonrisa Sam.- Dijo Aaron mientras volvíamos a casa.

      - He vuelto con Niall.

      - Esperan ¿que habían cortado? No me habías dicho nada.

      - Pues ya lo sabes, pero ahora hemos vuelto y... en fin... todo va sobre ruedas.- Dije entre risas.

      - Me encanta verte feliz.- Dijo bajando la cabeza.

      - Venga, hagamos una carrera para ver quién llega antes a mi casa.- Dije acelerando.

    Llegamos casi a la vez, ambos cansados.

      - ¿Quieres entrar?

      - No, hoy tengo que llevar a mi hermano pequeño al entrenamiento de fútbol.

      - Pues hasta mañana.

      - Adiós.- Dijo dándome un beso en la mejilla. Se fue con la bici caminando hasta su casa que estaba apenas una calle más lejos.

    Aparqué la bici y entré a casa.

      - Cariño, ya tenemos fecha para la boda.- Me dijo mi madre nada más llegar.

      - ¿Si? ¿Cuándo? ¿El 17? ¿El 20? AH, YA SÉ, EL 10.

      - Em... no. El 31.

      - ¿En Noche Vieja?

      - Ajá, al principio pensamos el 24, después el 25, pero creo que no habría mejor día que 31.

      - .... Ah... vale... ya sé por qué... entonces te vas a casar con Kevin el mismo día con el que te casaste con papá...

     - Pensé que sería bonito volver a empezar el mismo día que empecé por primera vez.

     - Em... yo... yo me subo. Tengo que estudiar y hacer deberes y bueno, hasta luego.

    Me puse a hacer los deberes, y acto seguido me tiré a la cama. Entonces tocaron a la puerta.

      - Samanta ¿puedo pasar?- Dijo una voz masculina.

      - Sí, adelante.- Entonces apareció Kevin.

      - Bueno, Sam, supongo que te dará miedo eso de tener a alguien nuevo en tu vida, y más si es alguien que se vaya a casar con tu madre.

      - Es cierto eso pero... por verla tan contenta... No la había vuelto a ver así desde que.... en fin... se fueron mi padre y mi hermano.- No me contestó, simplemente me dedicó una sonrisa y se fue.

     No sabía cómo me sentía en ese momento, pero, cuando quise darme cuenta me dormí.

                                          Continuará.................................

jueves, 27 de diciembre de 2012

Cap. 47: Un día muy normal




_Narra Niall:

    De vez en cuando quedaba con Samanta, pero tampoco mucho ya que yo tenía que trabajar y ella tenía que estudiar. Ya estábamos a finales de noviembre, era martes 27. Quedaba poco para diciembre, nos tocaba ir a EEUU para tocar en el Madison Square Garden. Yo ya se lo había dicho a Samanta, pero no podía ir por los estudios y tal.

    A la tarde, fui a su casa para ver si quería salir. Toqué a la puerta y, ahí estaba su madre.

      - Hola Niall.- Dijo alegremente.- Pasa anda, Samanta está en la cocina. Me alegró mucho saber que volvisteis.- Dijo acompañándome hasta la cocina.

      - Jaja. Bueno, y qué tal le van las cosas a usted y al Sr. Thomson.

      - Muy bien gracias.- Dijo sonriendo. Entonces, llegamos a la cocina.

      - Hija, traigo compañía.- Dijo entrando. Samanta se giró y vino corriendo a abrazarme.

      - Hola Niall.- Dijo abrazándome.

      - Hola guapa.

      - Aquí sobro. Niall, quédate todo el tiempo que quieras.- Dijo su madre saliendo de la cocina.

    Cuando su madre se fue nos besamos.

      - Bueno y hoy qué hacemos.- Dije acercándola más a mi.

      - ¿Te gustaría ayudarme con Mates?- Dijo apartándose de mi.

      - ¿Qué?- Dije entre risas.

      - Tengo deberes, estamos casi a final de trimestre, tengo que estudiar, bajé a la cocina solo para comer.- Decía también riéndose.

       - Bueno, con Mates no te podré ayudar demasiado peeeeero con otra cosa....

       - ¿Sacas a pasear al perro?- Dijo mientras ponía un plato en el lavavajillas.- No puedo sacarlo yo, estoy muy ocupada estudiando, mi madre está terminando asuntos del trabajo y Kevin está corrigiendo exámenes.

       - Sí, claro.

       - Perfecto, en la entrada está la correa, toma una bolsa para sus... como decirlo sin que suene mal... para sus excrementos.

       - Jaja, vale. Pues, nos vemos enseguida.- Dije cogiendo la bolsa y dándole un beso en la mejilla.

       - Nos vemos.

    Fui a por el perro y me fui por ahí, tampoco me fui muy lejos, me quedé por la zona solamente. No me reconocieron por suerte. Estuve algo más de una hora por ahí.


_Narra Samanta:

   Le dije a Niall que sacara a pasear a Trufa. Me volví a mi cuarto y seguí estudiando. En los próximos días tendría exámenes de todo.

   Estuve toda la hora y media encerrada en el cuarto hasta que llamaron a la puerta de la habitación.

      - PASA.- Grité sin dejar de mirar el libro de Biología.

      - Soy yo.

      - ¿Yo quién?- Dije sin darme la vuelta.

      - Yo Niall.

      - Ah, hola ¿qué tal el paseo?

      - Bien...oye ¿te costaría dejar el libro aunque sea solo para saludarme?- Dijo abrazándome por la espalda.

      - Lo siento, pero es que mañana tengo 6 exámenes, el jueves tengo 2, el viernes 5 y así de petada de exámenes hasta el día 18 de diciembre.

      - Anda, intenta relajarte un poco- Está demostrado que hay que descansar de vez en cuando mientras se estudia ya que sino te vuelves loco.... Bueno... en tu caso ya es demasiado tarde pero hay que intentarlo.- Dijo girando la silla de ruedas. Me salió una pequeña risa.

      - Vale. Entonces ¿qué hacemos?

      - No sé, dime tú.

      - Mmmmm.... Pregúntame el tema de Filosofía.

      - ¿Estás de broma? Ven aquí.- Dijo mientras me abrazaba. Entonces, empezó a hacerme cosquillas.

      - Jaja, Niall para enserio.- Dije sin parar de reírme.

      - Ah conque tienes cosquillas.

      - Jaja SI, Y AHORA PARA.- Dije intentando cogerle las manos.

    Estuvo molestándome un buen rato hasta que tocaron a la puerta.

      - Cariño, yo y Kevin vamos a salir a dar una vuelta y comeremos por ahí hasta lue.... ¿Qué estáis haciendo?

      - Em... NADA.- Dijimos Niall y yo al unísono levantándonos del suelo.

      - No estabais....

      - MAMÁ, POR FAVOR.

      - No, vale, solo quería asegurarme. Pues eso, Niall, quédate todo el tiempo que quieras que no pasa nada. Sam, sigue estudiando. Hasta luego.

      - Adiós.- En cuanto se fue, Niall y yo nos empezamos a reír.

      - Bueno, será mejor que me ponga a estudiar ¿me preguntas?

      - Vale, pero que conste que no me entero mucho de estos temas.

      - Tranquilo que yo tampoco me entero.- Le dije entre risas.

    Empecé a estudiar con él  o algo así. Más o menos me lo sabía todo. Estuvo todo el día conmigo hasta la noche.

       - ¿Te quedas esta noche a comer?

       - Vale.

      - Genial. Ahora hay que esperar a que mi madre... Es verdad... que salió a comer fuera, se me olvidó.

      - Pues no nos queda otra que hacer la comida nosotros. Venga.- Dijo mientras me cogía y me llevaba en el hombro como si de un saco de patatas me tratara.

       - NIAAAALL. BÁJAME, ENSERIO.- Dije dándole golpes en la espalda mientras bajábamos las escaleras.- SI NOS CAEMOS QUE CONSTE QUE TE MATO EH, TE MATO.

       - Tranquila. ¿Es que no confías en mi?- Dijo bajándome del hombro cuando llegamos a la planta de abajo.

     Fuimos a la cocina. Buscamos haber si había algo de comida, pero... tampoco es que hubiera mucha <<gracias mamá por alimentarme>> pensé.

       - ¿Quieres comida de perro?- Dijo sacando una bolsa del armario. Entonces le dí una pequeña cachetada.- Vale, lo tomaré como un no.- Dijo entre risas.

    Encontramos algo de pescado y unas patatas así que nos hicimos el típico menú de Fish & Chips.

       - Cuidado no te vayas a cortar.- Dijo Niall al verme con el cuchillo para pelar las patatas.

       - ¿ Insinúas que no sé cocinar?

       - No, simplemente que las personas se suelen cortar con los cuchillos.

       - Pesado.

    Terminamos y comimos, bueno, una lucha de comida hubo por ahí, pero nos lo pasamos bien. Limpiamos  toda la cocina y lavamos los platos.

        - Mira, me ducho rápido.

        - Claro. En lo que te duchas ¿qué te parece si voy al videoclub?

        - Genial. Elige una película QUE NO SEA DE MIEDO.

        - Miedica.

        - Malo, vete anda. Llévate mis llaves, están en mi escritorio.

    Me duché y me vestí lo más rápido que pude. Preparé todo para ver la película, las palomitas, la tele, etc. Tardó un tiempo en volver pero finalmente vino.

       - ¿Qué peli cogiste?

       - Peter Pan.- Dijo enseñando el DVD.

       - Jaja, ¿sabías que era mi película preferida de pequeña?

        - Casualidades de la vida.- Dijo entre risas.

    Nos pusimos a ver la peli, finalmente, nos quedamos dormidos en el sofá.


                        Continuará..................

lunes, 24 de diciembre de 2012

Cap. 46: Te necesito

Bueno, normalmente no me preocuparía, pero.. hace tiempo que no recibo comentarios de ustedes =( . Porfa, aunque sea solo porque hoy es Noche Buena o porque es el cumpleaños de Louis comentad =). Felices Fiestas. XOX: Melody. P.D.: Este es el último capítulo de hoy, mañana publico otros 2 ó 3 más =).




_Narra Niall:

    Los días se me pasaban lentamente sin ella. Ya estábamos a mediados de noviembre, exactamente, era el lunes 12. No habíamos hablado ni nada. Christy y Liam tampoco sabían nada de ella. Me preocupé... y si le había pasado algo malo, y si ya no vive en Londres... Me ponía en lo peor.

    Salí a dar una vuelta. Era por la mañana así que tampoco había mucha gente, se notaba que todos estaban trabajando o en el colegio. Entonces me llamaron al móvil.

(Reproducción de la llamada)

¿Diga?

Niall, soy Louis ¿dónde estás?

Por el Museo Británico.

Llegas tarde.

¿Tarde a dónde?

A la entrevista listo. ¿Te has olvidado?

Em... No... Pero...¿dónde era?

Si es que no tienes solución. Anda, yo voy para allá.

Nos vemos.

(Fin de la llamada)

    Pasó algo de tiempo hasta que vino Louis. Me llevó hasta el estudio donde nos estuvimos preparando.

      - Anda, sigues vivo.- Bromeó Liam.

      - Jajaja.- Entonces se acercó.

      - He hablado con ella.- Murmuró.

      - QUÉ TE DIJO.- Grité emocionado.

      - Que me echa de menos.

      - ¿Qué?

      - Hablé con Danielle.

      - Pensaba que...- Dije decepcionado.

      - Tranquilo, también hablé con Samanta. Me dijo algo que probablemente te pueda servir.

      - ¿El qué?- Pregunté bien atento.

      - Que te necesita en estos momentos.

      - ¿Por qué?

      - El mes que viene su madre se va a casar y quiere que alguien la acompañe. Dice que Alan no puede, pasa de pedírselo a Aaron y yo fui un buen amigo y le dije que no. Llámala que a lo mejor surge el tema y tal.- Cuando dijo eso me salió una sonrisa, iba a llamarla pero.

     - Venga, vamos a grabar ya.- Dijo el director.

     - Si, claro.- Dije guardando el móvil.

    No paraban de hacernos preguntas, yo era mirando todo el rato el reloj pero parecía que en vez de adelantarse se atrasaba.


_Narra Samanta:

    A las 2 de la tarde salí del instituto. El día anterior hablé para ver si podía encontrar a alguien con quién ir a la boda de mi madre. Las opciones se acababan, el único que me quedaba era Niall... Fue solo pensarlo y que me llamaran al móvil.

(Reproducción de la llamada)

¿Hola?

Soy Niall.

Ah, mira... ahora mismo no puedo hablar. Ciao.

Sam ¿por qué no podemos hablar como dos personas? Hubo un tiempo en el que estábamos bien.

(Suspiro) Vale... Habla.

Bueno ¿qué tal estás?

De maravilla y tú.

Podría estar mejor.

Bueno... Pues... Si no hay nada más que habar adiós.

SAM.

QUÉ.

¿Te apetece de vernos hoy?

Vale ¿dónde?

En el Starbucks.

¿En cuál de los miles de Starbucks?

¿Cuál crees tú?

(Sonrío) Vale. Y ¿a qué hora?

¿A las 3?

Perfecto. Nos vemos.

Adiós.

(Fin de la llamada)

    Fui a mi casa. Hice rápido la tarea. Me arreglé un poco sin saber el por qué, solo tuve el impulso. Me puse un vestido azul oscuro corto de tirantes, un chaleco negro, unas botas altas negras y me ondulé el pelo. Cogí una mini-bandolera negra y fui hasta el Starbucks.

    Estuve esperando un buen rato, ya había pedido un café. Niall se atrasaba. Ya eran las 15:30. Me iba a ir pero...

      - SAM, YA ESTOY, NO TE VAYAS.- Dijo Niall corriendo. Me empecé a reír.

    Iba con las gafas de sol para que no le reconocieran, una camisa blanca, unos vaqueros azules, una chaqueta de lana de color gris, las Converse blancas y se hizo un tupé. <<WOW>> Pensé.

      - Siento haber llegado tarde.- Dijo casi con el corazón en la garganta.

      - No pasa nada.- Dije sin parar de reírme.

      - Anda, ya no estás seria conmigo.- Dijo incorporándose poco a poco.

      - Em.... Yo...

      - ¿Nos sentamos?

      - Cla-claro.- Dije sonrojada.

    Estuvimos hablando y haciendo tonterías. Realmente me caía bien pero... solo como amigo... creo....

       - Oye ¿y cuándo se casa tu madre?

       - Em... creo que me dijo que era el 14 de diciembre.

       - Y...¿vas a ir con alguien?

       - No... Creo que prefiero ir sola.-<<Idiota pídele que vaya contigo>> me decía a mi misma.

       - Ah... Bueno, ¿te apetece caminar por ahí?

      - Por supuesto.- Dije sonriendo.

    Estuvimos hablando de nuestras cosas, algo más tranquilos, tuvimos suerte en que no reconocieron a Niall. En un momento dado me dio la mano, esta vez no la aparte. Me miró y nos paramos.

   
_Narra Niall:

       - Sam, estás muy guapa.- Dije sonrojado.

      - T-tu también.- Dijo Samanta algo nerviosa. Entonces nos empezamos a reír.

      - Te necesito.- Murmuré.

      - ¿Qué?

      - Que te necesito.- Dije subiendo un poco el volumen.

      - ¿Qué?- Entonces, me aparté de ella y me subí a un banco.

      - SAMANTA, TE NECESITO.- Grité a los cuatro vientos. Se sonrojó y vino a mi.

      - Yo también.- Dijo subiéndose al banco.

    Nos miramos a los ojos y finalmente nos besamos.

      -Te quiero.- Le susurré.

     - Y yo.- Dijo. Y nos volvimos a besar.

    La acompañé hasta su casa.

      - Oye que se me olvida ¿quieres venir conmigo a la boda?

     - Por supuesto.- Dije rodeandole la cintura. Le di un beso y me fui. Esperé a que entrara para porfin gritar.- SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII.- Y me volví a mi casa.


                                 Continuará.......................

Cap. 45: ¿Qué pasa?




_Narra Liam:

    Era sábado, no tenía nada que hacer, así que después de desayunar me fui a dar una vuelta por ahí. Quizás... Quizás estaba mejor solo...Sin Danielle.... creo...

    Necesitaba un cambio, fui a una peluquería y me rapé, me hice un par de tatuajes... No parecía yo, pero...


_Narra Samanta:

    Me puse a hacer la tarea del fin de semana, así podía tenerlo libre. Cuando terminé, bajé al salón.

      - Cariño, ven aquí.- Dijo mi madre que estaba con Kevin.

      - ¿Qué pasa?- Dije sin saber muy bien de qué iba el tema.

      - ¿Me ayudas con lo de la boda? A ver, tu qué crees que es mejor: Margaritas o rosas blancas.- Dijo mi madre enseñándome fotos.

      - Digo que... tengo 17, no sé nada de eso.

      - Anda, venga hija. Kevin, tu ve a mirar algún local para la comida, Samanta y yo haremos el resto.

      - Qué pocas ganas.- Dije echándome en el sillón.

      - Venga vaga.- Dijo mi madre levantándome.- Hasta luego.- Dijo mientras salíamos.

    Estuvimos yendo de tienda en tienda mirando flores, vestidos etc. Iba a entrar en una tienda de decorativos cuando alguien me tapó los ojos.


_Narra Niall:

      - ¿Quién soy?- Le dije a Samanta tapándole los ojos. La vi con su madre enfrente de una tienda.

      - Hola Niall.- Dijo su madre.

       - Hola señora Weck. ¿Quién se va a casar?- Les dije señalando a todas las revistas de bodas que tenían.

       - Mi madre.- Dijo Sam de mala gana.

       - Bueno yo voy entrando, os dejo solos.- Dijo la madre entrando a la tienda.

       - Bueno... y bien ¿para qué me molestas?- Dijo Samanta sacando el móvil.

       -  Bueno, no tengo nada que hacer... me aburro solo y los chicos están ocupados.- Dije metiéndome las manos en los bolsillos del pantalón.

       - Si te hace ilusión ayudarnos a mi y a mi madre con las cosas de su boda....-Dijo dejando el móvil.

      - Bueno.... Pues vale.

_Narra Samanta:

    Niall estuvo conmigo y mi madre para las cosas de la boda. Estuvimos haciendo coñas con las cosas, hacía tiempo que no estábamos tan bien.

      - Jaja, te pareces muchísimo a mi hija, no me extraña que salga contigo.- Dijo mi madre. Entonces hubo un gran silencio.

       - Señora, Sam y yo ya no salimos.- Dijo Niall soltándome la mano.

       - Ah... lo siento... Em, bueno, ¿vamos a mirar los vestidos?- Dijo mi madre avergonzada.

       - Claro mamá.- Dije.

    Llegamos a la tienda, Niall y yo nos quedamos un rato fuera a hablar.

       - ¿Y bien?- Dijo Niall.

       - ¿Y bien qué?

       - Que te quiero.

       - Pero yo a ti no.

       - Eso no era lo que decías hace un par de semanas.

       - Cambié de opinión.

       - Sam, dime solo la razón por la que me dejaste.

       - Por cosas mías.

       - Esa no es la respuesta.- Entonces me besó.

       - Niall...vete, voy a seguir ayudando a mi madre y eres a la última persona que me apetecía ver hoy.- Dije entrando a la tienda de vestidos de novia.

       - ESPEREN, ¿QUÉ HACEN?- Gritó un chico que venía corriendo a nosotros.

_Narra Liam:

    Les vi a Sam y a Niall besándose. Tenía cosas de boda en la mano y después entró a la tienda de vestidos de novia. Lo primero que se me pasó a la cabeza era que se iban a casar.

      - ESPEREN.- Grité yendo hacia ellos.

      - ¿Liam? ¿Eres tú?- Preguntó Niall.

      - Sí. TODAVÍA SOIS JÓVENES ¿QUÉ HACÉIS?- Dije señalando a todo. Entonces se empezaron a reír.- ¿Qué os hace tanta gracia?

      - Nosotros no nos vamos a casar, es mi madre.- Dijo Samanta entre risas.- ¿De verdad piensas que me iba a casar con este imbécil?

      - EH, RESPETO.- Dijo Niall.

      - CÁLLATE RUBIO.- Le gritó Sam.

      - ANDA AQUÍ LA CHICA DEL PUEBLO.

      - CALLAROS LOS DOS. Ahora mismo os estabais besando y ahora os estáis gritando. A ver estoy perdido.- Dije.

       - Chicos, ¿entráis u os quedáis fuera?- Dijo una mujer que se parecía a Samanta.

       - Ya voy mamá.

       - Vale. Quién, ¿quién es este chico?- Dijo la madre desconcertada.

       - Este es Liam mamá. MI NOVIO.- Dijo. Acto seguido me besó. No sabía que acababa de pasar. Niall se fue enfadado. La madre creo que estaba casi igual de desconcertada que yo.

       - Bueno hija... creo que será mejor que te vayas a casa. Ya sigo yo con las compras.- Dijo entrando a la tienda.

    Cuando ya se fue, Samanta se echó al suelo a llorar.

       - Lo siento Liam, yo... Lo siento. Mira me voy.- Dijo llorando.

       - No Sam. No puedo dejarte ir sola en este momento. Samanta, tu me ayudaste con lo de Danielle y yo te ayudaré con lo de Niall. Cuéntame el por qué de todo, otra vez, y esta vez, si es posible, más detallado.

       - LE QUIERO. ESE ES EL ÚNICO PROBLEMA.- Dijo abrazándose a mi para seguir llorando.- NO QUIERO QUERERLE.

       - Sammy, Sam, Samanta, él te quiere, tu le querías, ¿por qué de repente no? Fue así, muy rápido, le desconcertaste.

       - Supongo que fue porque... soy una tonta...

    Se fue y volvió a aparecer Niall.

      - Con que no la querías eh.- Dijo enfadado.

      - Niall todo esto tiene una explicación.- Dije.

      - ¿Cuál? ¿Qué me mentiste?

      - Niall, no es lo que piensas. Eso se lo inventó solo para hacerte enfadar.

      - Ya y yo me lo creo.- Entonces me empezó a pegar.

       - Tío, enserio. Por favor, tú sabes que yo no te mentiría.- Entonces se tranquilizó y lloró.- Anda, aquí tienes mi hombro, llora.

       - ¿Por qué me dejó?

       - Porque no quiere quererte. Bueno, yo me voy.

    Nos fuimos cada uno por nuestro camino.


                              Continuará...............................

domingo, 23 de diciembre de 2012

Cap. 44: Antes te quería, ahora no.





_Narra Samanta:

    No podía más con él, ya me harté de todo. Le quería, pero... ya no podía soportarle más. No quería estar con alguien que se molestara por el más mínimo paso que daba. Si esta hubiera sido la primera vez que se ponía celoso, hubiera sido otra historia, pero no era el caso, era la vez 1000 que se ponía de esta forma.

    Estuve centrándome en mis estudios durante todos esos días. De vez en cuando quedaba con Christy y Harry, con Liam, con Aaron, y me seguía pasando por el pueblo para ver a Alan, algunas veces también me veía con Louis y Zayn, el único que no me apetecía para nada ver era a Niall, y mucho menos cuando le dejé sin darle explicación alguna, aunque supuse que él se dio cuenta del por qué.

     Era viernes 19 de octubre. Quedé con Christy y con los chicos, incluyendo a Niall. Fuimos al pub que fuimos cuando acabaron la gira. Chris y Harry estaban mejor que nunca, por el contrario, Niall y yo no nos dirigimos ni la más mínima palabra. De vez en cuando nos mirábamos, pero nada más.

    Cuando terminamos esta ''reunión'' me fui con Liam, pero Niall primero se acercó a despedirse.

      - Sam... adiós.- Dijo mirando al suelo.

      - Soy fea, pero me gusta que cuando me hablen me miren a la cara.- Dije. Entonces, le salió una pequeña risa y me miró a la cara. Sus ojos azules, sin duda eran para perderse del mundo y olvidarse de todo.

       - Si tu eres fea me gustaría saber como sería alguien horrible.- Dijo cogiéndome de las manos. Me sentía bien. Entonces vino Liam.

       - ¿Nos vamos?- Dijo poniendo sus manos sobre mis hombros.

       - Claro. Bueno Niall, nos vemos.- Dije soltándole las manos. Creo que Liam me acababa de salvar de volverme a enamorar de él.


_Narra Niall:

    Tenía a Samanta enfrente mía, iba a besarla, pero apareció Liam para irse con ella. Me entraron instintos asesinos, pero no hice nada, solo miré como se iban hablando y riéndose.

      - Ella te quiere.- Me dijo Christy.

      - ¿Te lo dijo ella?- Dije intentando no llorar.

      - No, pero es mi mejor amiga, sé casi todo sobre ella, y esta vez sé que le gustas.- Dijo apoyándose en mi hombro.- Anda, alegra esa cara, yo ya me voy.- Dijo mientras cogía la mano de Harry que pasó al lado nuestro.

    Me despedí de Louis y Zayn y me fui a mi casa. Encendí la Play y empecé a jugar al Fifa. Seguramente no era la mejor forma para matar el tiempo, pero por lo menos me ayudaba a olvidar un poco.

    Después de un buen rato jugando, salí a dar una vuelta por Oxford Street y....


_Narra Liam:

      - ¿Interrumpí algo?- Le dije a Samanta mientras salíamos del local.

      - No, no era importante.- Dijo con su habitual sonrisa.

      - Oye, y... que le dejaras.... ¿fue culpa mía?

      - Claro que no, simplemente.... es que.... ya no es cómo antes.... ya no siento lo mismo que sentía por él antes...- Esa frase me hizo pensar ¿y si fue esa la razón por la que Danielle me dejó?, que ya no siente lo mismo...

    Fuimos por Oxford Street, no entramos a ninguna tienda solo estuvimos por ahí. Entonces, nos encontramos a un grupo de chicos de, supongo unos 18-17 años. Eran unos niñatos más que nada.

      - CABRONES.- Gritó Samanta cuando pasamos al lado de ellos.

      - ¿Qué pasa?- Le pregunté extrañado.

      - Los muy.... Me han tocado el culo.- Dijo con voz asesina.

      - Deja que de eso me encargo yo.- Entonces me fui a donde estaba ese grupo.

      - ¿Qué te pasa?- Dijo uno con el cigarro en la mano.

      - ¿Esa es forma de tratar a una señorita?

      - Miren al niño pijo.- Dijo un pelirrojo.- ¿No nos hemos visto antes? A SÍ, MI HERMANA PEQUEÑA ESTÁ OBSESIONADA CONTIGO. El chico ese famosín, cómo era... el del grupo ese extraño que no se qué.

      - Soy Liam, pero eso no viene a cuento.

      - ¿Qué vas a hacer? ¿Llamar a tus guardaespaldas? Uy, qué miedo me da.- Dijo el que parecía el líder, un chico con el pelo negro y un par de tatuajes en los brazos.

      - ¿Para esto? Na', prefiero divertirme yo.- Dije. Entonces le cogí el brazo y empecé a apretárselo contra la espalda.

      - Liam, para.- Dijo Samanta intentando apartarme del chico. El pelirrojo empujó a Samanta y me empezó a pegar. Vamos que la cosa fue cada vez a peor. Finalmente, se fueron, yo me quedé con sangre, pero no peor que esos chicos.

       - ¿Liam? ¿Samanta?- Dijo alguien acercándose. Samanta se giró a ver quién era, por el rostro de su cara supongo que sería alguien que no le cayera muy bien.

       - ¿Niall?- Dije incorporándome.

       - Sí.... qué...¿qué ha pasado?

     Samanta le contó toda la historia de mala gana. Me llevaron hasta mi casa.

       - Liam... gracias...- Dijo Samanta tímidamente.

      - De nada princesa.- Le dije dándole un beso en la mejilla. Se fue hasta la puerta de entrada a esperar a Niall para irse con él y Niall y yo estuvimos un rato hablando.

      - Tío ¿me quieres quitar a la chica?- Dijo Niall enfadado.

      - ¿Por qué dices eso? Samanta me está ayudando a superar lo de Danielle y me dice cosas que puedo hacer para recuperarla, además, ella te quiere a ti.- Le dije.

      - ¿Y cómo sabes tú eso?

      - Me lo dijo, pero ahora quiere estar un tiempo sola, tiene miedo a enamorarse demasiado.

      - ¿Y eso?

      - Dice que es la primera vez que sintió algo así por una persona y que teme a meter la pata.- Le dije para tranquilizarle.- Tranquilo.

      - Gracias.- Dijo poco convencido.

      - Bueno Niall ¿te vienes o me voy sola?- Dijo Samanta que venía para llevarse a Niall.

      - Si, vamos. Hasta luego Liam.

      - Adiós.- Dije sonriendo.

    Le diría a Niall que no me gustaba Samanta pero... no sé... era... era tan parecida a Danielle en muchos aspectos que... ni yo sabía....


_Narra Niall:

    Después de llevar a Liam a su casa, me fui con Samanta. La llevé hasta su casa y hablé un rato con ella.

      - Qué hay de tu vida. Hace tiempo que no hablamos.- Le pregunté cogiéndole la mano.

      - Nada interesante. No soy como tú, es decir, alguien famoso.

     - Mi vida tampoco es un camino de rosas....¿Por qué me dejaste?- Esperó un rato, se quedó cabizbaja y finalmente respondió.

      - Por... cosas.... Adiós.- Dijo dándome un beso en la mejilla. Le salieron un par de lágrimas y entró a la casa.

    No sabía exactamente si realmente  le gustaba o si simplemente... me odiaba por ser un idiota.


                             Continuará................

sábado, 22 de diciembre de 2012

Cap. 43: Solo el tiempo lo dirá




_Narra Christy:

    El lunes volví a ver a Samanta en el instituto, nos pusimos al día de todo. Me contó lo que le pasó a Liam.

      - ¿Y qué podemos hacer?- Le pregunté mientras mordía un cacho del bocadillo. Estábamos en la hora del recreo.

      - Pues nada, solo el tiempo lo dirá.- Me respondió.

      - ¿Hola? Creo que sabes de sobra que mi estilo no es ese.

      - Pues en este momento tendrá que ser tu estilo. Liam ahora necesita apoyo, ya sabes que cortar con alguien con el que llevas mucho tiempo saliendo es duro.

       -  POR ESO HAY QUE HACER ALGO.

       - Emm....- Antes de que Sam pudiera decir nada sonó la campana para volver a clase, así que dejamos el tema para más tarde.

    No podía concentrarme en la clase, solo podía pensar en Liam. Pasó el tiempo y volvió a tocar la campana para salir de clase y me puse a hablar con Sam antes de volver a casa.

      - Y entonces ¿que hacemos con Liam?

      - NADA. Solo el tiempo lo dirá. Si dos personas están destinadas a estar juntas, no importa los obstáculos que hayan, solo cuanto se quieren.

      - Que ñoña eres.

      - Bueno, pues yo me quedo aquí.- Dijo señalando su casa.- Nos vemos mañana.- Nos dimos un abrazo y seguí caminando hasta la parada del bus e ir a casa. Era un royo pero valía la pena solo por seguir en Londres.

    Llegué a la casa, todavía media perdida ahí dentro, fui a mi cuarto y salté, literalmente, a la cama. Estaba sola en casa, o estaba sola o Harry estaba al otro lado de la casa. Estube pensando en mis cosas hasta que me quedé completamente frita.


_Narra Samanta:

     ''Dar tiempo al tiempo'' como siempre solía decir mi padre. Yo también quería que Liam volviera a ser felíz, volverle a ver con Danielle, que todo le fuera bien, pero no se puede tener todo. Si Danielle le quería volverá con él, si no vuelve... entonces nunca le quiso.

    Me puse a hacer mi tarea, no tenía nada mejor que hacer, entonces me mandaron un mensaje al móvil.

(Reproducción del mensaje)

Hola Sam, soy Niall, bueno, ¿te apetece quedar? Si tal llámame =).

(Fin del mensaje)

    Tampoco es que tuviera muchas ganas de verle, pero, bueno, hacía su tiempo que no le veía y, total, que terminé mi tarea y le llamé para vernos.

(Reproducción de la llamada)

¿Diga?

Soy Sam.

No has tardado en llamar ni nada (entre risas).

Lo siento, tenía cosas que hacer. Bueno, entonces ¿dónde quedamos?

Dónde tu quieras, mientras esté contigo me da igual.

Pues, qué te parece si quedamos donde siempre, es decir, en el Hyde Park.

Perfecto, pues me paso a recogerte dentro de 5 minutos.

Genial, nos vemos.

(Fin de la llamada)

    No me arreglé, mucho, simplemente una camisa negra de tirantes, unos pantalones de chándal lila claros, las Converse negras, y me hice una coleta. Esperé en el banco que hay en mi jardín hasta que llegó.

      - Bueno, ¿vamos?- Dijo mientras entraba.

     - Por supuesto.- Le respondí sonriendo.

    Fuimos caminando y hablando de nuestras cosas, entonces me dio la mano.


_Narra Niall:

       - ¿Qué haces?- Dijo Samanta mientras movía la mano para que no se la cogiera.

       - Perdona, no pretendía.....

       - No... si... no pasa nada... esque....Bueno, sigamos.- Dijo caminando de nuevo.

     Últimamente se la veía diferente, más seria, más fría, más.... como si no fuera ella. Estaba demasiado fría conmigo. Me preguntaba si me seguiría queriendo, o si habría hecho algo que no le gustara. Fuimos callados durante el resto del camino hasta que al final llegamos  al Hyde Park.

       - Ven.- Dijo mientras señalaba un camino. Fui con ella, no sabía a dónde me llevaba, nunca habíamos entrado ahí. Me llevó hasta una pequeña heladería donde estaba......


_Narra Liam:

    No podía sacármela de la cabeza, y menos después de 2 años. Danielle era diferente, no podía imaginarme sin ella. Me quedé toda la mañana en mi casa llorando. <<No Liam, esto no es lo que debes hacer>> me dije a mi mismo. Me sequé las lágrimas. Ya eran las 2 de la tarde, el tiempo se había pasado volando. Salí a dar una vuelta para intentar olvidar. Llegué al Hyde Park, entonces me acordé de la heladería que me dijo el otro día Samanta. Entré y me senté en el primer asiento libre que encontré que había al lado de la ventana. Entonces escuché un par de golpes <<no.... fans en este momento no...>>. Entonces, me giré y, ahí la vi, con la sonrisa en su rostro, ahí estaba Samanta junto a Niall.

      - ¿Podemos entrar?- Dijo mientras cogía el brazo de Niall.

      - Claro.- Dije riéndome de la cara que tenía Samanta de perro abandonado.

    Entraron enseguida, bueno, Samanta simplemente corrió, Niall fue más lento.

      - ¿Estás mejor?- Dijo mientras me daba la mano. Niall me miró con una cara de asesino, no lo entendí muy bien.

      - Si, gracias.- Dije intentando no llorar.

      - No me mientas.

      - No te miento.

      - Ejem... Sigo aquí.- Dijo Niall algo molesto.

      - Ya sabemos que estás aquí.- Dije.- Eres tú el que no quiere hablar.

      - PUES NO HABLO PORQUE NADIE ME HA CONTADO NADA.

      - Niall no....- Interrumpió Samanta.

      - HE CORTADO CON DANIELLE.- Grité enfadado y llorando.

      - Liam yo... yo no...- Se disculpó Niall poniéndose a mi lado.

      - No si... da igual.... Me voy.- Dije mientras me iba.

_Narra Niall.

      - ESTARÁS CONTENTO.- Dijo Samanta más que enfadada.

      - Samanta... yo no... yo no...- Dije avergonzado.

      - Niall, enserio, a veces... a veces dudo de tu inteligencia.

      - Sam... yo no sabía nada.

      - PERO ESE ES EL PROBLEMA, SIEMPRE HABLAS SIN SABER.

      - Sam, por favor, hablemos con tranquilidad, por favor.

      - CÁLLATE. ADIÓS.- Dijo mientras se levantaba de la mesa.

      - Aquí está la cuenta.- Dijo una chica pelirroja, la camarera <<no te joda, y ahora tengo que pagar yo ¿no?>>. Después de pagar, fui corriendo a ver si podía alcanzarla.

    No sabía muy bien a dónde ir, solo fui a dónde mis piernas me guiaban. Londres era muy grande, encontrar a una persona en específico era como buscar una aguja en un pajar. La había cagado. Samanta era mi novia, Liam mi mejor amigo y.... simplemente la había cagado con ambos. Estaba celoso, no dudaba que en que tenían razones para enfadarse conmigo. Finalmente, la encontré, ahí, sentada en un banco, lo único que sentí fue no poder encontrar también a Liam. Ahí estaba Samanta, llorando, había metido la pata hasta el fondo.

      - SAMANTA.- Grité mientras iba hasta ella. Se giró, se levantó y se fue.- NO TE VALLAS, TE QUIERO.- Entonces se paró. Me acerqué a ella y la abracé.

      - Niall....- Dijo mientras se daba la vuelta.- Quiero.... quiero dejarlo...

      - ¿Qué?.... Más bien...¿Por qué? Estábamos bien...

      - No, Niall, no estaba bien.... está mal. Niall....adiós.- Dijo mientras me daba en la mano el colgante.

    Se fue sin decir nada. No me dio explicaciones. Me besó por la que sería la última vez. Le salían lágrimas, a mi también. Volví a casa desconcertado sin saber qué acababa de pasar. Me intenté dormí, ni si quiera cené, estaba triste. Sin duda, era un gilipollas.

                        Continuará.....................

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Cap. 42: No es para siempre




_Narra Christy:

       -¿Esta es la última caja?- Me preguntó Harry.

      - Si, es la última.- Le dije mientras le ayudaba a cargarla al camión de mudanza.

    Ya era sábado, me iba a vivir con Harry, me resultaba extraño. Eran las 8 de la mañana, Samanta nos ayudó con las cosas de la mudanza. Cuando terminamos, nos quedamos un rato hablando en la entrada de su casa antes de subir al camión de mudanza para ir a la casa de Harry.

       - Sé que no es un adiós para siempre, es más, el lunes tenemos clases y nos volveremos a ver pero....- Dije al borde del llanto.

       - Tu misma lo has dicho, nos volveremos a ver el lunes y tampoco te vas a China.- Dijo Sam con un par de lágrimas y con una risa fingida. Nos abrazamos y subí al camión. No era un adiós para siempre, pero lo parecía.


_Narra Harry:

      - Chris, ¿te pasa algo?- Le pregunté. Se la veía triste, estaba apoyada en la ventana mirando todo lo que había en la calle.

      - No.- Dijo sonriéndome.- Solo que.... Bueno, olvídalo ¿queda mucho para llegar?- Dijo incorporándose.

      - No, ya estamos llegando.- Le dije mientras apuntaba con el dedo a la señal en la que ponía lo que quedaba para llegar al lugar donde yo recidía en Londres.

    Llegamos, Chris cuando salió se quedó pedrificada al ver lo grande que era la casa desde fuera. Entramos las cajas de Christy a la casa y, cuando terminamos, le enseñé todo lo que era la mansión.

       - ¡¿Cómo no te pierdes en esta cacho mansión?!- Dijo entre risas.

       - No es tan grande.- Le dije riéndome.

    Ayudé a Christy a instalarse. La llevé hasta donde sería su habitación. Estaba cerca de la mía. Le ayudé a subir todas las cosas. Le ayudé a colocar todo y, cuando terminamos, nos tiramos en la cama uno al lado del otro, se acurrucó a mi lado y la besé, entonces, se apartó.

       - Harry, quiero decirte que no me pienso quedar a vivir aquí todo el curso.- Me dijo mientras se sentaba.

       - ¿Por qué?- Le dije incorporándome.

       - No puedo.- Dijo entre risas.- No puedo aprovecharme de ti de esta forma.- Dijo mientras me daba la mano.

       - No seas tonta, te puedes quedar aquí todo el curso, o para siempre.- Le dije sonriendo.

       - Jaja. Bueno, si no te importa voy al baño.- Dijo mientras se levantaba. Iba a salir y entonces se paró y se dio la vuelta.- Em...¿y dónde está el baño?- Dijo entre risas y todavía perdida con lo de la casa. Nos empezamos a reír y la llevé hasta donde estaba.

    Cuando salió, fuimos a dar una vuelta por el barrio.


_Narra Samanta:

     No era un adiós para siempre, pero lo parecía, era mi mejor amiga. Se iba a vivir con Harry, pero solo porque quería quedarse en Londres, no por otra cosa, porque yo sabía que ella no se iría a vivir con él a su edad de no haber sido por esta situación.

    Aproveché que era sábado para dar una vuelta, esta vez sola y con mi perro, llevaba un par de semanas chungas, entre que si la evaluación inicial, que si la mudanza de Chris, que si esto y que si lo otro, pues como que no.

    Cuando quise darme cuenta, estaba enfrente del Buckingham Palace. Me encantaba ir por esa zona, ver el cambio de guardia para mi era de lo más entretenido. Tras un tiempo caminando me paré en Hyde Park, me acosté en la hierba y dejé a Trufa correr por el parque con otros perros.

       - ¿Quién soy?- Dijo alguien mientras me tapaba la cara con una revista de deporte. Estaba media dormida por lo que no daba el clavo, pero, ese olor era inconfundible.

       - ¿Liam?- Dije mientras me sentaba y me daba la vuelta.

       - Cuanto tiempo.- Dijo mientras me ayudaba a levantarme.- ¿Qué tal te va todo?

       - Muy bien, ahora empecé las clases, Christy se ha mudado con Harry, en diciembre se casa mi madre con Kevin... Y, ¿qué tal te va a ti, y qué tal con Danielle?

        - Jaja. Bueno, todo bien y con Danielle... bueno... no sé....- Dijo bajando la cabeza.

        - Anda, ya verás como se soluciona.- Le dije mientras le miraba a la cara sonriendo. Levantó la cabeza y nos empezamos a reír.

    Llamé a Trufa, le puse la correa y me fui a dar una vuelta con Liam. Era una gran  persona, pero se le veía algo triste, se notaba que las cosas no le iban perfectas, entonces, se me ocurrió una forma de alegrarle un poco.

       - ¡Ven!- Le dije tirándole el brazo y corriendo.

       - ¡¿Qué pasa?!- Dijo mientras corría. No le respondí.

     Paré de correr y le señalé una heladería.

       - Antes de que empiece a hacer mal tiempo no hay nada como un helado ¿no?- Le dije entre risas.- VENGA ENTREMOS.- Dije tirándole del brazo, ambos nos empezamos a reír.

       - Te invito yo.- Dije buscando el monedero en mi mochila.

       - No, te invito yo.- Dijo con una sonrisa mientras me cogía el brazo para que parara de buscar dinero.

     Pedimos un par de copas de helados de esas grandes y nos sentamos en una mesa algo escondida para que nos molestaran.

      - Ahora, cuéntame realmente lo que pasa con Danielle.- Le dije mientras cogía una cucharada de su helado, él estaba enfrente mía.

      - Vale... Hemos acabado.- Dijo bajando la cabeza, estaba triste y le  salió alguna que otra lágrima.

     Cuando ya estaba apunto de llorar me senté a su lado ofreciéndole mi hombro para llorar.

       - Liam.- Le dije mirándole a la cara.- Sonríe, no me duele verte así. Piensa de este modo: Puede que no se haya acabado para siempre, sino solo un por ahora.- Le dije apunto de llorar. Me miró a la cara y se empezó a reír.

     Acerqué mi copa de helado y me quedé a su lado.


_Narra Liam:

    Danielle estaba rara conmigo, parecía muy fría. Harto ya de todo quise hablar con ella.

      - Danielle, cariño, ¿qué te pasa?- Le dije mientras le cogía la mano. Eran las 9 de la mañana.

      - Liam, ya no puedo más.- Me respondió soltándome la mano.

      - ¿Cómo que ya no puedes más?

      - Deberíamos dejar esto, darnos un tiempo. No puedo soportar el odio de algunas fans y.....

      - ¿Así? ¿Sin más? ¿Después de dos años?- Le dije dándome la vuelta para que no me viera llorar.

      - Liam....

      - No, da igual, lo entiendo y... si no te importa me marcho.- Le dije casi corriendo hasta la puerta. <<Adiós>> me dije a mi mismo.

    Me fui por ahí a ver si podía olvidar un poco lo que acababa de pasar. Entre lágrimas, logré sacar alguna sonrisa para las fotos conlos fans que ma iban reconociendo. Llegué a Hyde Park y encontré a alguien que conocía lo suficientemente bien.

     - ¿Who I am?- Le dije mientras le tapaba la cara con una revista deportiva que me había comprado.

     - ¿Liam?- Dijo Samanta inconporándose. Se levantó y me abrazó.

    Dimos una vuelta juntos. Me llevó a una heladería, allí le dije un poco lo que me pasó con Danielle, pero ella, no sé cómo, me hizo olvidar un poco lo pasado y a volver a sonreir. Era una gran amiga, sin duda, Niall tenía suerte de tener a alguien como ella a su lado.

    La acompañé a su casa y acto seguido yo me fui a la mía. Ya no estaba Danielle, ni sus cosas, pero, a lo mejor no era un adiós para siempre, sino un hasta luego......

                                 Continuará..............................................